Fondement dialectique et raisonné, origine de l'œuvre
No somos más que puras marionetas manejadas a antojo con el único fin de lograr objetivos concretos. El problema no reside tanto en ser una marioneta o elemento componente que forme parte de ella y quizás de un compromiso asumido voluntariamente para obtener un beneficio global, sino de estar administrados por individuos incapacitados que no conocen ni tienen idea del funcionamiento de las instituciones que regentan. Se permiten ensayar con nuestras vidas, nos obligan a realizar maniobras y movimientos incoherentes, inservibles, infructuosos que ni tan siquiera ellos tolerarían hacer en sus propias carnes y lo que es peor, se permiten establecer acuerdo sectarios dentro de sus grupos de gobernabilidad que les conceda privilegios encubiertos amparados por el ocultismo y una capacidad de convicción sostenida por la buena fe de la gente que aún les sigue y que les permite realizar una tras otra actuaciones mediocres que desvirtúan continuamente el esfuerzo y el trabajo común. Nuestros deseos e ilusiones quedan reducidos a una escasa capacidad de elección establecida de antemano. Nuestros gestos, nuestras gestiones y nuestras operaciones están hasta lo más mínimamente calculadas, procesadas y controladas para que nada de aquello que suponga retener o apropiarse de un ingreso quede exento de recaudo. La voluntad no tiene cabida dentro de un sistema que tiene milimétricamente calculado el flujo de movimientos que se han de llevar a cabo.
"Hilos, cabos sueltos de unos títeres que instalados en el hastío del descontento, acabaron por desprenderse de sus ataduras."
“Los valores bajo los que se sustenta nuestra sociedad nacen del materialismo puro. El pragmatismo y los intereses materiales son la única y fundamental ambición en torno a lo cual todo gira. Las imperfecciones en el comportamiento y las pautas del ser humano son la consecuencia extrema de asociar hedonismo y materialismo y esto es lo que analiza ésta serie de obras.”